
I. El peligro mexicano
El 18 marzo de 1938, Lázaro Cárdenas expropió la industria petrolera extranjera y precipitó una crisis que estuvo a punto de desembocar en un conflicto armado entre México, Estados Unidos y Gran Bretaña. El Capitolio en Washington y el Parlamento en Londres fueron teatros de esta guerra antimexicana, en donde los cabilderos de las petroleras, muchos empresarios y más políticos, integraron los aguerridos batallones.